Lanzado el pasado 2 de febrero bajo el programa Acceso Anticipado de Steam, Valheim propone una experiencia cooperativa incluso para quienes no están acostumbrados al género de los juegos de supervivencia. Desarrollado por Iron Gate, un estudio compuesto por tan solo cinco personas, se podría decir que Valheim es y seguirá siendo la sorpresa de este 2021 que recién comienza, ya que le publisher Coffee Stain Studios, anunció que Valheim ya amasó más de cinco millones de copias vendidas a un mes de su estreno, y habiendo superado los 500.000 jugadores simultáneos en Steam -logrando posicionarse quinto en el ranking de picos máximos de los títulos de Steam. Con un roadmap lleno de nuevo contenido para los próximos meses, Valheim solo seguirá impactando con sus cifras a lo largo del año.

El género survival no es algo necesariamente nuevo dentro del gaming, podemos irnos décadas atrás y encontrar incluso varios juegos que encajarían dentro de la definición, pero claramente hay una moda en los últimos años, con juegos como Minecraft, Don’t Starve, DayZ, H1Z1, Dying light, The Forest, Ark: Survival Evolved, Rust, Outward, etc, cada uno con un enfoque distinto y un impacto diferente.

Las mecánicas de supervivencia no castigan al jugador y están balanceadas para evitar que sean una preocupación constante como suele pasar en juegos como Outward. En Valheim no morirás de hambre, sino que, por el contrario, podrás beneficiarte de una dieta balanceada con tres tipos diferentes de comidas que harán el truco de optimizar tu barra de vida y resistencia. Otras comidas aumentarán al doble tu barra de salud y también podremos encontrar recetas que nos permitan resistir el veneno y el frio. Considerando que en Valheim no llevas una mochila, tendrás que llevar suficientes raciones para el viaje, pero a la vez tener espacio libre en tu inventario para traer lo que recojas en el camino.

Pero lo que hace que Valheim sea tan especial, es su aspecto cooperativo que le da una maravillosa sensación de comunidad. Es una excelente aventura de descubrimiento y recompensas difíciles de alcanzar con muchas muertes en el camino por simplemente poner un pie en algún lugar para el que no estás preparado. No hay una curva de dificultad en Valheim por así decirlo, sino que hay picos de dificultad altísimos y afilados. Eso se siente frustrante al principio, pero eventualmente, y extrañamente, se vuelve alentador.

El juego alcanza su climax cuando uno ve que el conjunto de sus mecánicas funcionan como deben. Elaborar, construir, recolectar, luchar, explorar, saquear. Todos van de la mano entre sí. La idea principal del juego es sencilla, somos un vikingo que cayó en el campo de batalla y el cuervo de Odín nos trae al décimo reino (el purgatorio Valheim), una tierra llena de criaturas impías en donde residen cinco grandes enemigos del Dios Nórdico. Estos jefes serán nuestra forma de progresar en el juego ya que desbloquearemos nuevas tecnologías con cada uno que matemos, pero esta no es una tarea para nada fácil.

Estos jefes son inspirados tanto por la saga Darks Souls como por los Elder Scrolls, y nos obligaran a aprender patrones y elaborar estrategias para derribarlos y obtener su poder -aunque cueste entender qué hacen exactamente estas bonificaciones. El nivel de dificultad aumenta considerablemente con cada uno y los enfrentamientos deben tomarse muy seriamente si no quieren terminar desperdiciando un montón de recursos por nada.

Es mi primer viaje en mi pequeña balsa de madera y veo como lentamente, mientras aprendo los controles voy alejándome de la costa hasta que aparece el título OCEANO, ya no sé de dónde venía, pero tampoco hacia donde estoy yendo, ¡de repente una tormenta! El mar se agita, pierdo toda visión, estoy asustado. Me siento vulnerable. Nunca antes había abandonado mi isla inicial y no tengo idea de lo que me espera en el enorme mundo generado proceduralmente. Después de una larga y tensa noche de navegación, finalmente vuelvo a ver el horizonte, veo el mapa. Es un nuevo continente y me apresuro a llegar para hacer un campamento, pero me veo abrumado por los enemigos. Todo mi progreso y mi balsa quedan al otro lado del mundo.

No hay eventos scripteados (excepto por las batallas contra los jefes) y son tan aleatorios como la vez que un Troll destruyó nuestra casa y balsa arruinando nuestros planes de quedarnos en ese continente, intentamos vencerlo, pero nuestras flechas solo le hacían cosquillas y oh por Dios, que error fue ir a atacarlo con armas melee!

Mirar al cielo y ver las raíces del Yggdrasil desplegarse y brillar por todo el mapa es un detalle hermoso, así como también es ver una “isla” en el medio del mar que parece tener recursos de minerías raros, pero ¿estás seguro que es una isla y no la espalda de algún ser marítimo gigante?

La banda sonora realizada por Patrik Jarlestam (a quien pueden seguir en sus redes sociales o Reddit) acompaña tu aventura todo el tiempo. Durante el día es una suave melodía que nos guía como el viento en nuestras labores, de noche cambia totalmente su tono ante las amenazas que nos acechan y no hay nada como la primera vez que escuchas la música de viaje marítimo, esa melodía se te quedará grabada durante los largos tour que harán; los sonidos por otro lado pueden alertarnos de la presencia de enemigos, indicarnos una fogata encendida, un rio cerca o animales salvajes para nuestra supervivencia.

Nos aventuramos ahora al bosque negro nos encontraremos con una nueva aventura: ¡Las mazmorras! Estas pueden ser una sorpresa, uno nunca sabe que se puede encontrar al entrar o donde puede aparecer lo que hace que cada expedición sea más interesante que la anterior. En ella, encontramos recursos únicos que hacen que valga la pena explorarlas. Esto conduce a nuevos descubrimientos, lo que a su vez conlleva a nuevas recetas y a más novedades. Luego de saquear unas cuentas mazmorras y habiendo derrotado al primer jefe, estamos preparados para crear una forja y un horno de fundición. ¡Adiós armas de piedra, bienvenida la era del bronce!

Por supuesto, al tratarse de una versión inicial de un Acceso Anticipado y creado por cinco personas, no todo es de color rosa en Valheim. El bajo presupuesto del juego se pone en evidencia en sus básicos y pocos intuitivos menús, o las animaciones básicas que nos lleva a hablar de cada habilidad, desde saltar, hasta ser sigiloso se puede subir de nivel repitiéndola, aunque no nos darán mucha información sobre cuál es el beneficio que ganamos al subir un nivel. Un sistema de talentos no le vendría nada mal al juego ya que el énfasis en el co-op podría hacer que tomemos roles distintos y cada compañero se especialice en algo en particular.

Otra acotación para hacer es que por momentos el grindeo se puede tornar irritante. Podemos partir a un nuevo continente y encontrarnos que un recurso que necesitábamos no va a aparecer ahí, obligándonos a volver al hogar y recogerlo allí o bien al comienzo del juego, y conseguir recursos como cuero, por ejemplo, para fabricar un arco para cazar venados, puede llevar más tiempo del que estaríamos dispuestos a invertir. Es una pena que nuestros enemigos no arrojan sus armas al vencerlos, ya que sería una adición genial que recompensaría el hecho de buscar enfrentamientos en zonas sin explorar.

Tener una casa grande y cómoda es muy importante. A pesar de que el creador a veces no puede darnos lo que queremos, hay muchas mecánicas bien hechas, tal como la necesidad de tener una hoguera dentro de casa, pero esta debe tener una chimenea para no morir asfixiados por el humo. Los trofeos que iremos consiguiendo al matar enemigos pueden colocarse en las paredes para aumentar nuestro nivel de confort. ¿Y para qué sirve esto dirán? Básicamente prolonga el tiempo de la bonificación de descansar allí, de modo que tener un lindo hogar no será una cuestión de mera estética, sino que también mejorará nuestra estadística.

Lo más importante para destacar es que este Terraria vikingo en 3D se puede jugar solo, pero está pensado para disfrutarlo con amigos, en servidores de hasta diez personas, pero cuatro es la cantidad justa ya que es un número más realista y fácil de coordinar, y se disfruta mejor con teclado y mouse que con un gamepad.

Los desarrolladores prometieron un total de nueve jefes finales para este año, lo que seguramente involucre cuatro nuevas eras de desarrollo y construcción. Lo que Valheim hace, lo hace bien. Dan en el clavo con el aspecto de supervivencia y con la porción de creación de mundos. Los jefes principales y su dificultad son sumamente desafiantes, y presenta una gran variedad de ítems para explorar, crear y combatir el mundo.

A pesar de que su visual no es la gran cosa, Valheim se siente refinado y satisfactorio como está ahora, y sin lugar a dudas tuvo la impactante recepción debido a que está sumamente pulido para ser una versión inicial de Acceso Anticipado, con pocos a ningún bug. Ocasionalmente habrá screen tearing y algún que otro bajón de frames por falta de optimización, pero nada de eso evita que la aventura sea memorable y puedas pasar más de cien horas de juego hasta derrotar al último jefe.

Valheim se encuentra disponible en Steam por u$s 19.99 o precio regional. En algunos países de Latinoamérica está muy barato. De hecho, en Argentina cuesta tan solo $225 ARS (o u$s 2.49, más impuestos), de modo que no hay mucho que pensar si están buscando un juego para jugar con amigos.

Este preview fue realizado con copias de prensa proporcionadas por Coffee Stain Publishing y Iron Gate Studio.

Dejar una respuesta