El genero de estrategia en tiempo real no esta atravesando sus mejores momentos. En el paisaje actual de la industria, donde lo que prima es la acción rápida y las experiencias “ligeras”, los RTS parecen no tener lugar. Por supuesto que aún quedan algunas vacas sagradas, como Starcraft, Company of Heroes o Total War, pero el panorama es realmente desolador. Me atrevo a decir que desde Sins of a Solar Empire que no llega al mercado una nueva propiedad intelectual dentro de este genero que además se anime a presentar una idea fresca e innovadora. Y de eso ya han pasado casi siete años.

Es por este motivo que la llegada de Ancient Space ha llamado bastante la atención entre los fanáticos del género. Ante la sequía, la oferta que nos traen Paradox y Creative Forge, se presenta como una alternativa interesante para salir de las IPs ya conocidas y buscar algo nuevo.

Pero a pesar de lo mencionado hay una comparación a la que Ancient Space no puede escapar: Homeworld. Si bien el juego de Crative Forge es diferente en varios aspectos al ya legendario RTS de Relic, hay muchos elementos en común: Ambientación espacial, enfoque puesto en el juego de un solo jugador, gestión de una nave “madre”, objetivos dinámicos, etc.

Sin embargo, intentaremos evaluar a Ancient Space por sus propios meritos en el presente review. Pero sin olvidar que este juego, por decisiones de diseño y artísticas de sus desarrolladores, descansa a la sombra de un gigante de la estrategia.

Ancient Space es un juego de estrategia sin componente multijugador y enfocado fuertemente en la narrativa. Y como tal el juego esta obligado a presentarnos una historia interesante. La historia no sitúa en una región del espacio conocida como La Zona Negra. Se trata de un escenario repleto de anomalías, nebulas, fragmentos de asteroides y muchos misterios. Esta región inhóspita del espacio no esta inhabitada, en ella han establecido su morada piratas, bandidos y alienígenas. Y en lo profundo de las nebulas, se dice que un ancestral poder espera su momento para emerger. La acción del juego nos sitúa diez años después de la desaparición de la nave Ulysses 1, perdida en la zona mientras investigaba una posible amenaza alienígena.  Al mando de la nave de combate Ulysses 2 será nuestra misión proseguir la tarea de la expedición anterior y averiguar cual ha sido su destino.

En el comando de nuestra flota, se encuentra un grupo de eclécticos personajes que funcionaran como nuestros ojos y oídos de cara a la historia. La narrativa gira en torno a la doctora Willow Burke, principal ideóloga de esta nueva expedición y líder “de facto” de la flota tras los trágicos eventos que se desenvuelven en las primeras misiones. Para evitar spoilers de la historia, que tiene sus giros y vueltas de tuerca, diremos que en definitiva cumple con su objetivo. El misterio que envuelve a la desaparición del Ulysses 1 es interesante y los secretos que oculta esta región del espacio son dignos de ser descubiertos. Donde la historia falla es en la presentación, pero ya hablaremos de eso más adelante.

Ancient Space divide su campaña en 15 misiones. En todas ellas nuestra nave principal será el Ulysses 2, corazón y alma de nuestra flota: perderla significará la derrota. Ulysses 2 tiene capacidad de fuego y defensa suficiente para valerse por su cuenta, pero para cumplir los distintos objetivos no bastará con ella sola. El juego nos ofrece un variado repertorio de naves que podremos construir a lo largo de las misiones. Las naves de combate están divididas en cuatro categorías, de acuerdo a su tamaño: pequeñas, medianas, grandes y extra-grandes. Y cada una de ellas tiene distintas ventajas y desventajas. Las naves pequeñas, por ejemplo, son más débiles pero poseen más maniobrabilidad y velocidad, lo que las hace ideales para enfrentar a las grandes y pesadas naves nodriza enemigas, así como también para responder más rápidamente a distintas amenazas que puedan surgir en distintos puntos del mapa. Tanto el Ulysses 2 como el resto de las naves pueden ser mejoradas entre misiones, hay una cantidad de upgrades interesante que ayuda a reforzar las fortalezas de nuestras naves, aunque es llamativo que dichos upgrades no se condicen con cambios significativos a nivel gameplay.

La construcción esta dictaminada por un sistema de gestión de recursos basado en nodos de control, similar a lo que puede verse en juegos como Company of Heroes o Dawn of War. Controlar distintas zonas nos permitirá obtener más recursos que a su vez nos servirán para agrandar nuestra flota y reponer las naves que vayamos perdiendo. El sistema es funcional, pero lo he encontrado poco profundo. En la mayoría de las misiones simplemente me limité a reconstruir cada nave a medida que iban cayendo, la penalización por perder las naves más pequeñas es solo un pequeño tiempo de espera hasta que nuestra nueva nave este lista para el combate. Solo la pérdida de una nave de mayor envergadura significará un golpe importante para nuestras oportunidades.

El diseño de misiones es otra área en la que Ancient Space muestra algunas falencias. En muchas misiones nuestro objetivo será aguantar la embestida de interminables oleadas de naves enemigas mientras protegemos a algún blanco importante. Esto hace que el juego por momentos se ponga realmente difícil, al punto que no nos den los dedos para reaccionar a múltiples amenazas que lleguen de distintos sectores del mapa (si bien hay una función de pausa + comando que alivia este inconveniente). El problema es que esta dificultad me ha parecido bastante artificial. Arrojar interminables cantidades de enemigos contra el jugador no es una buena decisión de diseño si lo que se busca es que el juego sea difícil, pero no frustrante.

A este inconveniente se suma una extensiva necesidad de micromanagement. Las naves en Ancient Space se rigen por un rígido conjunto de reglas “piedra, papel, tijeras”. Es decir, una determinada jerarquía de naves (ordenadas por tamaños, recordémoslo), será más efectiva contra otro grupo, y prácticamente no podrá hacerle daños a naves del grupo contrario. El problema es que la IA es incapaz de detectar por su cuenta cuando los disparos de una nave no están haciendo mella en un rival, y por lo tanto no hay cambios de blanco automáticos. Esto fuerza al jugador a estar constantemente pendiente de donde están sus naves y a que le están disparando. Lo cual, francamente, no es demasiado entretenido.

Además de modo campaña, Ancient Space presenta un modo escaramuza. Pero este modo en realidad es una gran mentira. Tras apretar el botón que dice “Skirmish” en el menú principal llegaremos a una pantalla de selección con tres escenarios pre-establecidos. Sin duda un modo así no aumenta demasiado la rejugabilidad.

Comenzaremos con el trabajo de voz para analizar el aspecto audiovisual de Ancient Space, ya que este apartado fue uno de los grandes “ganchos” de venta que tuvo el juego. Ancient Space cuenta con un elenco de actores de voz que resultará inmediatamente reconocible para cualquier fanático de la ciencia ficción: John Billingsley (Dr. Plox en Star Trek Enterprise), Aaron Douglas (Chief Tyrol en Battlestar Galactica), Dina Meyer (Dizzy Flores en Starship Troopers), entre otros. Lamentablemente el trabajo de estos actores no pude aplaudirse. Con la excepción de Dina Meyer, quien interpreta a la Dra. Burke, el resto de los actores parece haber telegrafiado sus interpretaciones, sin un ápice de pasión o sentimiento. Lo cual hace que sea realmente difícil identificarse con los personajes, que terminan siendo totalmente olvidables. Esta falencia del juego daña enormemente la presentación de la historia, que por demás es interesante, pero esta tan pobremente narrada que es difícil sentirse involucrado en la misma. Verdaderamente es una pena que el talento de esta gente haya sido desperdiciado.

La banda musical del juego también se revela como poco inspirada, cumple con su cometido de funcionar como acompañamiento de la acción, pero es repetitiva y cansa bastante rápido. El tema que suena durante el combate en particular es bastante flojo.

En lo visual Ancient Space sale algo mejor parado. No es el juego con las mejores texturas ni efectos, pero el cuidadoso diseño de los distintos escenarios, los detalles incorporados a cada una de las naves y la fluidez de la acción hacen que el paquete final sea algo digno de admirarse.

En retrospectiva, Ancient Space es un RTS de oportunidades perdidas. La idea de situar la acción en una región desconocida del espacio y presentarnos un misterio interesante para revelar podría haber dado sus frutos si el diseño de misiones y la presentación de la historia hubieran estado a la altura. En cuanto al gameplay estratégico, Ancient Space es funcional, si bien no trae casi nada nuevo a la mesa. Estos elementos hacen difícil recomendar este juego, tal vez solo los fanáticos más acérrimos del combate estratégico espacial puedan encontrar encanto en la dificultad que presenta el titulo.

Ancient Space – Review
Historia65%
Gameplay65%
Graficos80%
Música y sonidos50%
Lo bueno:
  • Historia interesante.
  • Componente estratégico funcional.
  • Buenos gráficos.
Lo malo:
  • Elevada necesidad de micromanagement.
  • Actuación de voces poco convincentes.
  • Dificultad frustrante.
65%Nota Final
Puntuación de los lectores: (2 Voto)
71%

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