Vago, cleptómano, sociópata, alcohólico. Esas son solo algunas de las características que pueden utilizarse para describir a Raldal Hicks, protagonista de Randal’s Monday  la aventura gráfica que nos presenta Nexus Game, de la mano de Daedalic Entertaiment. Y es que en este caso nos toca ponernos en los (sucios) pantalones de este personaje detestable, uno de esos tipos que nos alegraríamos de no tener en nuestro círculo de amigos en la vida real. Como mínimo se puede decir que resulta bastante original tener que cumplir el rol de un individuo de tal calaña.

Nexus Game Studio es un joven estudio de desarrollo español, y no es de extrañar que su primera incursión en el mercado sea con una aventura gráfica. Los desarrolladores de la madre patria tienen una larga historia con este tipo de juegos. Desde clásicos como La Abadía del Crimen hasta ofertas más recientes como Yesterday, a los españoles siempre se les han dado bien las aventuras interactivas.

En este contexto, Randal’s Monday es un producto que no demuestra demasiada originalidad. Una aventura gráfica bien a la vieja usanza, el juego se sostiene sobre mecánicas ya bien probadas y efectivas para contar una historia que cobra inspiración de distintas películas y series, pero principalmente de la película Groundhog Day. Plagado de referencias culturales, puzles que desafían la lógica y humor del más chabacano, estamos ante un juego que lamentablemente peca de excesos por un lado y de increíbles falencias por otro.

Todo comienza un domingo a la noche en un bar. Randal y sus amigos Matt y Sally están pasándola de maravillas entre copa y copa. Resulta que Matt y Sally están comprometidos y pronto van a casarse. En uno de esos momentos de confidencia entre amigos, Matt le enseña a Randal su anillo de compromiso, una joya “única en el universo”, que Matt cambió a un vagabundo por un dorito. Tras una serie de situaciones que involucran mucho alcohol y mucho vómito, el anillo cae en las zarpas inescrupulosas de Randal.  Al día siguiente, Randal se enfrenta a sus aparentemente eternos problemas habitacionales y económicos y luego de una seguidilla de circunstancias poco agradables decide empeñar el anillo a cambio de una autentica pila de dinero. Pero de aquí en más Randal descubrirá que el anillo le ha maldecido y está condenado a repetir el mismo día lunes una y otra vez. Nuestra misión entonces será guiar a Randal en su búsqueda por intentar romper la maldición y enmendar las cosas con sus amigos, aunque para lograrlo tenga que hacer cosas aún más desagradables.

El hecho de que Randal tenga que repetir el mismo día lunes de forma cíclica tiene un impacto directo en la mecánica del juego. Si bien el resto del mundo no se percatará del bucle temporal, Randal si lo hará, así como también todo objeto con el que él interactúe. Esto incluye al inventario de Randal y a cualquier otra cosa. Por ejemplo, si rompemos una escalera en el primer día, en el segundo día esta escalera permanecerá rota. Los habitantes del nuevo día tal vez no recordaran cuando o como se rompió la escalera, o tendrán otra explicación para ello, pero las cosas que Randal afecte permanecerán inmunes a la distorsión de espacio-tiempo.

Esta mecánica es en los papeles algo muy interesante, pero lamentablemente a la hora de trasladarse al gameplay presenta algunos problemas. La jugabilidad de Randal’s Monday recuerda mucho más a las aventuras gráficas del ayer que a los modernos cuentos de David Cage o Telltale. Avanzaremos en el juego resolviendo distintas situaciones mediante la interacción con el entorno y con nuestro inventario. Los objetos del inventario pueden combinarse y también es posible examinarlos para descubrir cosas ocultas dentro de ellos, y es mediante el uso de estos objetos que lograremos resolver los distintos puzles que nos presenta el juego. El problema está en que el inventario de Randal es permanente, y a veces es posible que un objeto que recogimos en el primer día nos sea útil recién en el tercero o en el cuarto, lo que provoca que el inventario se vuelva demasiado grande y complejo. Peor aún, es posible que no recojamos un objeto en un día determinado y lo necesitemos mucho más adelante. El juego nos dejará avanzar, pero al llegar al momento donde ese objeto sea necesario nos veremos obligados a volver a recorrer todas las zonas para encontrarlo. Por ejemplo, me pase por alto de recoger un rotulador en el día uno, y ese rotulador era necesario para un puzle en el día tres. Si no fuera por el sistema de pistas podría haber estado trabado en ese puzle durante horas. Algo así es frustrante, no divertido.

Para colmo, muchos de los puzles son reminiscentes de la situación de “Pato de goma en la vía electrificada” de The Longest Journey. Hay situaciones que carecen completamente de lógica o que nos obligan a realizar cantidades ingentes de backtracking por el mapa para realizar acciones de lo más mundanas. Algunos de los puzles están bien diseñados y sus resoluciones son entretenidas pero el conjunto total es bastante mediocre. Muchas situaciones se sienten forzadas y pareciera ser que la gente de Nexus Game añadió a las situaciones pasos completamente innecesarios e ilógicos solo para alargar la vida útil del juego. Por ejemplo, en un momento necesitamos abrir una cerradura para acceder a un catálogo de lencería (no me pregunten porque). Lejos de tener que buscar una llave o encontrar alguna otra solución más simple el juego nos obliga a visitar tres o cuatro lugares, recoger varios objetos (que debimos haber recogido en los días anteriores) y combinarlos de las formas más ridículas e ilógicas para formar una ganzúa casera. Estúpido, innecesario y frustrante.

Como si fuera poco con esto, el jugador también va a tener que lidiar con serios problemas técnicos y de programación. En al menos una docena de situaciones el juego me ha fallado de distintas maneras. Más allá de glitches gráficos y algún problema de audio, lo más grave de todo esto es cuando el juego falla en activar algún “trigger” dentro de un puzle o bien no nos permite interactuar con determinados objetos y situaciones. Para ejemplificar, en un momento de la aventura ordené a Randal examinar un caño de desagüe y el personaje me informó que había algo dentro del caño. Cuando intenté interactuar con el caño nada ocurría, me marché del lugar pensando que era una referencia a la cultura popular que no había captado o algo así. Pero más adelante (otra vez gracias al bendito sistema de pistas), me di cuenta que tenía que agarrar un limón podrido que estaba dentro del caño, volví al lugar y esta vez sí me dejó interactuar con el objeto. Inexplicable.

Como verán, hay dos elementos que vengo mencionando bastante en la reseña: las referencias a la cultura popular y el sistema de pistas. En cuanto a las referencias, basta decir que Randal’s Monday está plagado de ellas, en un nivel que casi roza lo absurdo. Cómics, películas, series y otros videojuegos, vamos a encontrar detalles visuales que van desde Volver al Futuro hasta Resident Evil. Es bastante entretenido ponernos a mirar los escenarios a ver que referencias visuales o auditivas captamos, pero creo que se les ha ido un poco la mano. Cuando en la misma puerta de una heladera hay referencias a El Club de la Pelea, Game of Thrones y Half-Life sabemos que entramos dentro del terreno de lo excesivo. Las referencias culturales son tantas y tan preeminentes que terminan perdiendo la gracia. En cuanto al sistema de pistas, es en realidad mucho más que eso, se trata de un mecanismo que nos cuenta con lujo de detalles como terminar el juego. Al menos está hecho con gracia, el botón para destrabar la siguiente pista se llama “matar un gatito”, pero me da la impresión de que este sistema existe porque la gente de Nexus Game estaba consciente de los problemas graves que tiene su producto en cuanto a mecánicas. Las pistas funcionan como un parche poco elegante para esos momentos en que nos trabamos por el pobre diseño de puzles o los problemas de programación.

El aspecto visual de Randal’s Monday es un punto positivo. Por supuesto que el juego no es ninguna proeza técnica, pero el diseño de los personajes y los escenarios es muy bueno. El juego tiene muchos pequeños toques visuales que le dan al mundo un gran sentido del humor, y más allá del exceso de referencias culturales hay muchos momentos que son realmente muy graciosos. Salir a la calle un buen día y ver que casualmente la ciudad está llena de koalas fue un momento que realmente me hizo reir mucho por lo absurdo. Otro elemento que ayuda muchísimo al humor es el excelente trabajo de voces realizado, al menos en su versión en castellano. Randall, Matt, Sally y el resto de los personajes secundarios están interpretados de manera magistral, y estas interpretaciones ayudan muchísimo a vender las absurdas situaciones que ocurren en pantalla. El sistema de diálogos también es muy interesante, por lo general de las tres o cuatro opciones que tenemos solo una nos servirá para avanzar los acontecimientos, pero vale la pena explorar las otras solo para ver las cosas disparatadas que Randal tiene para decir.

En conclusión, estamos ante un producto que presenta muchas fallas, y es realmente una pena porque la premisa bajo Randal’s Monday es bastante interesante y el juego tiene una gran cuota de humor. Se nota que la gente de Nexus ha puesto gran empeño en la presentación del juego, ya que visualmente es muy bueno y el trabajo de voces es maravilloso. Pero es imposible pasar por alto los graves problemas que tiene esta aventura. Al intentar emular la jugabilidad y dificultad de las viejas aventuras gráficas, Randal’s Monday cae en la vieja trampa de confundir complejidad con dificultad absurda. Y si sumamos a esto una importante cantidad de problemas técnicos estamos ante un producto que no cumple con las expectativas.

Randal’s Monday – Review
Historia60%
Gameplay30%
Gráficos70%
Música y sonidos80%
Lo bueno:
  • Gran sentido del humor
  • Gráficos agradables
  • Excelente trabajo de voces en español.
Lo malo:
  • Pobre diseño de puzles
  • Gravísimos problemas técnicos
  • La premisa atenta contra la jugabilidad.
45%Nota Final
Puntuación de los lectores: (2 Voto)
85%

Una Respuesta

  1. innerdrum

    ¡Y yo que lo tenía en mi wishlist de steam!
    Una lástima, Esperaba algo más de la cruza entre los alemanes de daedelic (creo que son alemanes) y el estudio español.
    Por lo menos no es un título de esos de buscar objetos como los son los juegos de daedelic basados en obras de shakeasphere.

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