Con la revelación de Dirt 5, Codemasters parece haberse puesto como meta dejar en claro que la serie ha sido definitivamente dividida en dos: Rally para los acérrimos amantes de la simulación; Dirt a secas para la rama más arcade y accesible de la franquicia. Y para que se entienda, el trailer de anuncio está lleno de acción y colores fluorescentes.

Esta nueva postura, directa y casi despojada de sutilezas, es quizá la consecuencia de los raros resultados de Dirt 4, que a pesar de ser muy bueno, y ya existir el primer Dirt Rally dentro del catálogo del publisher, fue vapuleado por cierto grupo de fans que lo acusaron de blando y carente de “realismo”. Y esto es porque la división de la franquicia ya estaba planeada en las internas de Codemasters, pero probablemente -por la sorpresa del éxito de Rally-, no fue del todo bien comunicada.

Llegamos a 2020, y tras un segundo gran éxito con Dirt Rally 2.0, la campaña de marketing arranca con un mensaje por demás claro, que pone a Dirt 5 en un lugar más parecido a la serie Horizon de Forza, establecida ya en los años de la Xbox 360 por el estudio Playground Games.

La demo de Dirt 5, a la que pudimos acceder para este anticipo, cuenta con un reducido catálogo de vehículos, circuitos y modalidades de competencia, pero es la referencia clara de todo esto que venimos diciendo: será el arcade puro y duro de la serie, respaldado por su deslumbrante estética saturada de colores, diseños de vehículos reales pero modificados de forma extravagante, y controles precisos y rápidos, tanto para el gamepad como para los volantes.

Definitivamente, este no es un juego para quienes busquen simulación de físicas precisas o ajustes de vehículos que marquen una diferencia, sino que en realidad, es el arcade que muchos vienen esperando para recuperar un género casi extinto. De alguna forma, este recupera el vertiginoso espíritu arcade que se podía encontrar en los SEGA Rally, por más que a alguno le suene a blasfemia.

Para probar -en esta ocasión- solo contamos con cuatro circuitos que representan a cuatro de las diez locaciones que ofrecerá el juego final, y cada uno de ellos pertenece a una categoría diferente, que si bien no es determinante de una modalidad de carrera, sí se diferencian por el estilo de terreno al que enfrentaremos.

Tenemos Ultracross, una versión super extrema del rallycross que conocemos de la vida real; Land Rush, con terrenos más cercanos a lo tradicional del rally, sin abandonar el vértigo de los circuitos de carreras en asfalto; Stampede, otra variante que agrega desniveles y saltos muy poco realistas; y Sprint, que representa a la tradicional categoría americana llamada Sprint Car Racing, que pone motores de 900 caballos en meras estructuras de caños y alerones para derrapar en circuitos ovalados de barro.

Como es tradicional de la franquicia, los vehículos presentados para esta build también representan a diferentes categorías muy poco relacionadas entre sí, entre las que se encuentran clásicos del rally de los años 90, modernas SUV todoterreno con potentes motores turbo, y algunos vehículos ligeros también diferenciados por época de desarrollo.

Al tratarse de un arcade, el juego parece igualar el tipo de categoría de vehículos con el que participamos en cada circuito, por lo que no va a haber sorpresas a la hora de competir a través de sus diferentes modalidades.

Una de las más grandes novedades dentro de la serie no solo es su reconocimiento como arcade sin pretensiones, sino que además presentará clima dinámico dentro de cada partida, por lo que nos encontraremos con grandes sorpresas que surgirán de forma aleatoria. Los circuitos pueden comenzar con un clima soleado y mantenerse así durante toda la competencia, o llevarnos a través del tímido inicio de una tormenta hasta una noche de vendavales y relámpagos, cuadro que a su vez se ve embellecido por las luces que se encienden en la pista y los característicos faros de xenon de los autos de rally.

En cuanto al gameplay cabe destacar que, a pesar de todo el trabajo que han implementado en favor de la accesibilidad, no es un juego que no presente un gratificante desafío, sino que requiere de cierta habilidad. Por suerte, esto no significa que imita a la gran mayoría de los arcades que buscan artilugios raros a dominar por el jugador, como el derrape en el género de los karts o el más reciente Need for Speed, ni los boosts de “nitro”, sino que se basa puramente en los controles, con una experiencia algo más parecida a la del último Grid o el genial Wreckfest.

En las carreras que hemos podido probar, Dirt 5 se perfila como uno de los juegos de velocidad más divertidos y desafiantes de los últimos años, a pesar de que a esta build aún le faltan muchos ajustes de optimización y balance de vehículos. La propuesta ha encontrado el punto exacto en donde la acción desenfrenada y el control inteligente de vehículos construyen una experiencia de pura dopamina, manteniendo el estilo único de la serie que también fue parte del gran Dirt 4, aunque esta vez con todas las advertencias pertinentes para no ser incomprendido.

Queda por ver cómo se completará el plantel general de vehículos, y qué otras grandes sorpresas nos esperan en las seis locaciones restantes que aún no pudimos experimentar. Lo que sí queda en claro, es que gracias a los avances del motor gráfico, que viene acompañando a la serie de sus inicios, este es un título que definitivamente está preparado para la próxima generación de consolas, y eso también nos beneficia a nosotros, porque pocas veces hemos visto efectos climáticos y variaciones en terrenos de barro y nieve tan impactantes como en esta nueva entrega.

Dirt 5 es prometedor, y si se lo entiende como lo que realmente es, dejando de lado la idea de que la franquicia debería responder a una simulación realista, va a satisfacer a la gran mayoría de gamers que, por razones de gusto, habilidades o ausencia de volantes profesionales, se han quedado afuera de una muy particular franja del amplio espectro de juegos de carrera. Ahora solo resta esperar a octubre para poder disfrutarlo en su totalidad y descubrir si finalmente Codemasters ha logrado construir una propuesta diferente que complemente a los ciclos de desarrollo a los que apunta la franquicia.

Este preview fue realizado con una copia de prensa proporcionada por Deep Silver/Codemasters.

Sobre El Autor

Edición y redacción. Diseño.

Temperley. Buenos Aires. Argentina

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